Compruebas que todo el equipo esté listo y te sumerges en el agua.
Empiezas a bucear y a pocos metros te ves rodeado por tortugas marinas y mantas raya. Hay mucha luz en el agua. Nadas un poco más y ves catalufas, sargos y burritos listados.
Sigues descendiendo y puedes contemplar todo con muchísima claridad.
Sabes que dentro de poco tendrás que subir a la superficie, pero mientras tanto, disfrutas del maravilloso espectáculo bajo el mar.