La gran profundidad que alcanza la costa tinerfeña y la influencia de la Corriente del Golfo convierten el mar que rodea Tenerife en el hábitat ideal para viejas, sardinas, samas, chernes, abadejos, meros, cabrillas, chicharros, chocos y caballas, entre otros.
Estas especies de pescado son también las más apreciadas en las cocinas canarias, donde se elaboran sin quitarle protagonismo a su sabor. Se consumen guisados o fritos, acompañados de salsas o papas que convierten los platos de pescado en una delicia.
Un buen ejemplo es la vieja, que se captura muy cerca de la costa y se sirve acompañada de papas arrugadas y mojo canario.
El cherne es muy habitual en las cazuelas, muy populares en el norte de Tenerife.
Por otro lado, el caldo de pescado se aprovecha para elaborar el escaldón, un plato típico muy popular en el que el otro gran protagonista es el gofio (harina de cereales tostados) amasado.